All the content in this website is licensed under a CC BY-NC-SA 4.0 Creative Commons License. Feel free to use what you want without any commercial use. Gabriel Llinàs, 2021.
La exposición aborda los dispositivos y dinámicas de producción del arte emergente a partir de diversas aproximaciones basadas en la experiencia personal.
El discurso narrativo se articula alrededor de una serie de obras (entre el objeto encontrado, la instalación y la obra plástica) que reflexionan sobre conceptos vertebradores de la práctica artística como el proceso creativo, la trayectoria, el constante anhelo de subsistencia o la dialéctica entre cotidianidad y trascendencia.
En colaboración con Ada Fuentes
Subsòl Art Contemporani
2019
When the WIP comes down Narratives del treball en art
Vista general de When the WIP comes down Narratives del treball en art. Espai Subsòl d'Art Contemporani (2019).
2. Marco de referencia. Biel Llinàs. Colección de documentos de exposiciones, imanes y chinchetas (2016-19).
3. Perímetro de actuación. Biel Llinàs. Acrílico sobre tela, bastidores y cintas de audioguías.
4.Trampantojo. Biel Llinàs y Ada Fuentes. Acrílico sobre tela, bastidor y cinta de carrocero.
1. Estudi. Biel Llinàs i Ada Fuentes. Cinta fluorescente e hilo de nylon (2019).
Visita del Grado en Bellas Artes de la Universitat de Barcelona (Iniciación a los procesos y proyectos, impartida por Mercè Ubalde).
5. La pintura es cosa mental. Biel Llinàs. Impresión digital montada en cartón pluma y agujas.
6. Sediments. Biel Llinàs. Acrílico sobre tela montada en 31 bastidores.
7. Next. Biel Llinàs. Acrílico sobre tela, cinta negra y sillas.
8. S/T. Ada Fuentes.
Tinta sobre papel.
When the WIP comes down. Narrativas del trabajo en arte, tiene como punto de partida el título de uno de los temas del álbum Some Girls (1978) de The Rolling Stones, titulado When the whip comes down. El tema narra la experiencia de un ciudadano de Los Ángeles que decide partir a Nueva York, persiguiendo sus aspiraciones vitales. El cambio, que por una parte se le presenta como una oportunidad para reafirmarse y autorealizarse, en una ciudad liberal y más abierta, acaba convirtiéndose finalmente en una losa que lo expulsa de su zona de confort, relegándole a recorrer las calles durante la noche para ganarse el pan. Partiendo de este trasfondo, a través de la simple sustracción de una h, se subvierte la expresión del título, transformando el «whip» (látigo, objeto asociado a la disciplina) por «WIP» (siglas del imperativo mainstream Work in progress) que, precediendo el «comes down» apunta hacia una cierta caída o interrupción de la producción. En este punto emerge una desgarradora contradicción terminológica que, con carácter revelador, sintetiza tanto el tono como las líneas discursivas de la exposición, que plantea una reflexión sobre los procesos de producción que configuran el actual circuito del arte y el papel que juega en él el artista emergente, partiendo siempre desde una perspectiva personal.
La exposición se articula en torno a una serie de propuestas, a medio camino entre la instalación, la obra plástica y el objeto encontrado que abordan algunos de los principales temas que marcan la práctica artística contemporánea como pueden ser los espacios de producción (físicos y simbólicos), los formatos o las metodologías de creación, especialmente aquellas que apuestan por prácticas dialógicas donde el conocimiento se produce a partir del intercambio entre diversos agentes (artistas, comisarios, gestores culturales o incluso agentes externos al sector). Este último punto deviene especialmente relevante, ya que varias de las obras aquí presentes han sido expuestas a un largo proceso de gestación, fruto de múltiples conversaciones dilatadas en el tiempo entre Biel Llinàs y Ada Fuentes, enmarcadas por la cotidianidad de aquellos momentos y espacios comunes habitados diariamente. En este ir y venir de ideas, formas y materiales, han confluido a menudo planteamientos e intenciones sobre cómo tratar y formalizar una serie de cuestiones en relación al trabajo artístico que apela a ambos artistas desde vertientes diferentes, como puedan ser la creación, la mediación o la gestión cultural. De espíritu decididamente autoetnográfico, la muestra visibiliza ciertas dinámicas, desde una actitud desenfadada pero que cuestiona (a través de la ironía) una realidad profesional marcada por una continua lucha por la supervivencia, enmarcada en lo que el crítico cultural Mark Fisher definió como realismo capitalista.
Así, When the WIP comes down se plantea como una especie de ensayo centrado no tanto en el qué sino en el cómo de la producción artística emergente actual. La exposición -como producto de consumo cultural-, el proyecto de creación -formato por excelencia de validación e institucionalización de propuestas artísticas-, las convocatorias de creación -paradigma de participación y visibilización pública de proyectos- o el taller -espacio personal de producción- en sus múltiples dimensiones, son algunos de los dispositivos que se han puesto en juego. Asimismo, hay que poner en valor la poética del lenguaje (tanto en los títulos de algunas obras como en su materialización) a partir de recursos semánticos como la paradoja, la metáfora, la repetición (a través de estructuras modulares) o la dialéctica entre presentación
y representación.
Finalmente, el diálogo con los elementos arquitectónicos del espacio, se convierte en el fundamento a partir del cual articular un relato que reflexiona sobre la propia práctica partiendo de la pintura, pero que finalmente la desborda, desembocando en una propuesta inmersiva. Es por ello que el display expositivo se plantea como un work in progress abierto y
diáfano que pueda ser trazado e interpretado en varios sentidos.
Curadoría por Ada Fuentes y Biel Llinàs
Texto curatorial